Spa Natura Resort

Spa Natura Resort cuenta con una ubicación estratégica desde la que acceder a todo tipo de actividades, desde buceo hasta turismo y ciclismo. Las playas de Peñíscola son famosas en toda España, particularmente su Playa Norte, con cinco kilómetros de arena sobre los que tomar el sol y aguas tranquilas estupendas para nadar y hacer piragüismo. También se puede practicar buceo, windsurf y navegación en motos de agua en Peñíscola, principalmente desde el centro de deportes acuáticos que hay en la Playa Sur. Tómate el tiempo de pasear por Peñíscola como tal, ya que alberga muchos otros puntos de referencia aparte de sus playas: la “ciudad del mar” es un puerto portificado en lo alto de un cabo que data de tiempos ibéricos y que ha sido regida por los fenicios, griegos y cartagineses. Además, su castillo del siglo XIII, construido por los Caballeros Templarios, hoy en día está abierto al público. Otras opciones de entretenimiento en Peñíscola incluyen pasear por las murallas hasta la Puerta de Felipe II en el casco antiguo y una visita al Museo del Mar, en donde encontrarás un acuario, fósiles y numerosas conchas marinas. Después, camina hasta el puerto para ver a los barcos pesqueros descagar su mercancía. El Parque Natural de la Sierra de Irta queda a un par de kilómetros del camping y es verdaderamente espectacular: hasta cierto punto inexplorado, es un destino estupendo para el sennderismo, el ciclismo de montaña y la equitación, y alberga a la ermita de San Antonio en lo alto de sus montañas. Un viaje de una hora conduciendo hacia el interior te llevará al Parque Natural de la Tenencia de Benifasar, en donde podrás practicar el mismo tipo de actividades al aire libre y ver animales como cabras montesas y jabalíes silvestres, aparte de pinturas rupestres que forma parte del Sitio Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO del Arte rupestre del arco mediterráneo de la península ibérica (intenta decir el nombre completo del sitio mientras subes alguna colina del parque sin perder el aliento). Asimismo, el Parque natural del Prado de Cabanes-Torreblanca queda a unos 40 minutos conduciendo y está constituido por un humedal de 860 hectáreas.