Camping Montmorency

Bourbonne-les-Bains tiene mucho con que entretenerte durante varios días. Está a poca distancia caminando de la piscina pública, un casino, un «spa», pistas de tenis y el magnífico arboreto de Montmorency, un fantástico paraje natural con árboles provenientes de los cinco continentes. También a unos cinco minutos conduciendo se encuentra el parque de animales La Bannie, que alberga ciervos silvestres, jabalís y aves. Además de la localidad, hay muchos destinos rurales que merecen una visita. Entre los lagos de la zona que valen la pena visitar está el lago de Morimond (a 20 minutos), un cuerpo de agua tranquilo junto a una antigua abadía, donde se pueden alquilar botes de remo, y el lago de la Liez (a media hora), un lago más grande con una playa y una amplia variedad de deportes acuáticos y otras actividades. Esta parte del este de Francia cuenta con mucha historia y patrimonio. Los anfitriones recomiendan en especial dar un paseo por las murallas de la ciudad fortificada de Langres (a 40 minutos) y admirar la vista del campo circundante desde lo alto de sus 12 torres. También hay otras atracciones como el museo de la cubertería en Nogent (a media hora), la abadía de Auberive (a 50 minutos) y el monumento conmemorativo de Colombey-les-Deux-Églises (a una hora y diez minutos).