Le Mas de la Grenouillère

Hay muchas actividades fuera de este sitio para mantenerte entretenido: comienza con una visita a la aldea medieval de Joyeuse. Recorre las calles adoquinadas entre el castillo del siglo XVI y las antiguas murallas; sírvete un par de copas de vino en Cave de Lablachère y haz una excursión de barranquismo y rapel en Gecco Aventure. Encuentras todo esto a 10 minutos conduciendo. Este paraje también es idílico para disfrutar de la naturaleza: Le Mas de la Grenouillère queda muy cerca del límite entre el Parque Natural Regional de los Montes de Ardèche y el Parque Nacional Cévennes, por lo que hay muchas rutas de senderismo y ciclismo, además de otras opciones como escalada, piragüismo en canoas y en kayaks, descenso en parapente y arborismo. Una visita a la garganta del Ardèche es imperdible: conocido como el Gran Cañón europeo, vale la pena explorar este espectacular valle atravesado por el río Ardèche. Dirígete a Vallon-Pont-d’Arc, a 35 minutos del sitio, y alquila una canoa para pasear por la garganta hasta llegar a Saint-Martin-d’Ardèche. No hay mejor paseo para admirar el hermoso Pont d’Arc (declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco) ya que el río corre por debajo. Hay muchos lugares para conocer en esta región: preciosas aldeas, museos, castillos e incluso parques de dinosaurios, pero al explorar bajo tierra todo se vuelve incluso más interesante: la increíble gruta de la Cocalière, Aven Marzal y Aven d’Orgnac quedan a una hora. Pero lo que realmente es imperdible es la caverna de Pont d’Arc, la réplica de tamaño real de la cercana cueva de Chauvet con sus maravillosas pinturas rupestres.