Camping du Trez

Lo más probable es que los primeros días de tus vacaciones en la zona los pases en la playa, así que aprovecha la proximidad de Bénodet para también explorar la localidad. Se encuentra en la desembocadura del río Odet, en el que puedes navegar hasta Quimper si te apetece alquilar un "kayak" o una canoa. Por el contrario, explora los museos o toma el ferri a las islas Glénan. Las islas Glénan son una visita imperdible durante cualquier estancia en esta parte de Finisterre, así que no te pierdas la posibilidad de conocerlas. Se las conoce como las Tahití bretonas, y sí, son así de espectaculares como suena, con playas de arena blanca, mucha navegación y buceo, y bonitas flores autóctonas. De regreso en el continente, hay muchas más localidades y ciudades por las que puedes pasear. Comienza tus recorridos con una visita a la increíble localidad de Pont-l’Abée (a 20 minutos en coche) y a su castillo, museos y jardines botánicos. Luego ve a Quimper (a 25 minutos), donde encuentras un castillo, jardines, una catedral, museos, cervecerías, destilerías y mucha alfarería. Haz un viaje de unos 30 minutos para ir a los puertos de Saint-Guénolé, Guilvinec, Lesconil y Loctudy para regatear pescado fresco. Por último, deja de lado el mar, practica senderismo en el Parque Natural Regional de Armorique (a 35 minutos) y sube a los Monts d’Arrée.